Efe 5:16 aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos.
Dios espera que el creyente use su tiempo sabiamente.
Mucha gente nunca termina lo que comienza. Hay sinfonías sin terminar, pinturas sin terminar y esculturas sin terminar (en ocasiones debido a que el compositor o artista murió) Existen relaciones que nunca se convierten en lo que podrían ser, ministerios que nunca dan fruto, sueños que permanecen sueños y esperanzas que permanecen esperanzas. Para mucha gente, la vida puede ser una sinfonía sin terminar o un sueño sin realidad. Pero no tiene que ser así. Yo creo que la respuesta se puede encontrar en “aprovechando bien el tiempo” (Efe 5:16)
Si queremos convertir nuestros sueños en realidad y esperanzas en hechos, (terminar nuestras sinfonías, pintar nuestras pinturas, y esculpir nuestras esculturas) sólo será cuando hayamos aprovechado bien nuestro tiempo. Yo creo que en el pasado eterno, Dios predeterminó el tiempo específico que íbamos a vivir. Y sólo cuando aprovechemos al máximo ese tiempo, podremos mantener su potencial para el cumplimiento.
El apóstol Pablo supo de primera mano la importancia de redimir el tiempo. En Hechos 20:24 dijo: “pero de ninguna cosa hago caso, ni estimo preciosa mi vida para mí mismo, con tal que acabe mi carrera con gozo y el ministerio que recibí del Señor Jesús” En otras palabras, Dios nos ha dado un límite de tiempo y dentro de ese tiempo Él ha definido un curso. Pablo en efecto dijo “quiero terminar el curso específico, el ministerio específico y en el tiempo específico que me fue dado” Al final de su vida Pablo pudo decir: “he peleado la buena batalla, he acabado la carrera” (2 Tim 4:7) él pudo completar la carrera porque supo aprovechar el tiempo.
Creo que Dios soberanamente nos ha dado a ti y a mí un periodo de tiempo específico. Él conoce el comienzo y el final porque Él ha predeterminado ambos. Asegúrate de terminar tu carrera al caminar sabiamente y vivir para Su gloria.
Por John MacArthur